Si hay algo que no cambia con el paso del tiempo en el mundo de las motos, es el espíritu de la Vespa y su concepto de vida fácil y alegre. No en vano esta pequeña moto monocasco fue una de las principales promotoras de un nuevo estilo de vida que se impuso tras la oscuridad de los tiempos vividos durante la segunda guerra, ayudando a las personas a movilizarse y reactivar sus vidas tanto a nivel económico como social.
Desde entonces y hasta nuestros tiempos la Vespa, en cualquiera de sus versiones, ha mantenido ese carácter de vehículo amable, económico y sencillo de operar. La más reciente renovación de esta marca se conoce como Primavera, pensada para los más jóvenes, este modelo se ofrece con 4 distintas motorizaciones: 50cc 2T, 50cc4t 4 válvulas, y 125cc y 150cc 4T 3 válvulas con inyección electrónica.
Respecto a versiones anteriores la Primavera cuenta con una mayor distancia entre el manubrio y el sillín que tiene un nuevo perfil, el tablero es enteramente digital, tiene espacio suficiente bajo el asiento para albergar un casco tipo Jet, llantas de 11″, mayor distancia entre ejes (que mejora la estabilidad) y luces LED para el día y en la luz de freno.
